¿Por qué llora la gente cuando ve películas o programas de televisión?

Una de las preguntas que más nos hacen es: «¿Por qué llora la gente en el cine?».

Es una pregunta interesante, sobre todo porque no tiene una respuesta sencilla.Como alguien que ha roto a llorar en múltiples ocasiones durante las películas, siempre me ha fascinado este fenómeno.

Hay muchas razones por las que la gente llora con las películas o los programas de televisión, y a veces esas razones pueden ser difíciles de precisar.

He aquí algunos de los principales factores que pueden hacerte llorar durante tu próximo visionado.

Lloramos cuando un personaje con el que nos identificamos ve cumplidas sus esperanzas, o cuando un personaje con el que nos identificamos sufre una desgracia.

Lloras cuando un personaje con el que te identificas ve cumplidas sus esperanzas, o cuando un personaje con el que te identificas sufre una desgracia.

A menudo nos permitimos empatizar más con los personajes de las películas que con las personas reales porque es más fácil distanciarse de ellos.

No conocemos personalmente a ninguna de estas personas, por lo que nos resulta más fácil sentir que estamos viendo cómo se desarrolla algo desde lejos en lugar de vivirlo en primera persona, y esta distancia hace que nos resulte más fácil empatizar con el protagonista en cuestión.

Cuando tu personaje favorito consigue por fin lo que quiere (o no), se desencadena una respuesta emocional en ti porque esos acontecimientos son significativos para ambas partes implicadas: Tú quieres lo mismo que el protagonista; si él no lo consigue, ¡tú tampoco!

Los personajes de las películas pueden ser más cercanos que los de la «vida real».

A la mayoría de la gente le cuesta identificarse con los personajes de su propia vida.

A menudo sentimos que somos la única persona que ha vivido ciertas cosas, lo que puede hacernos sentir solos y aislados.

Los personajes de las películas son ficticios, pero también muy cercanos, porque los interpretan actores que están más cerca de nosotros que nuestros propios amigos y familiares.

Conoces a esos actores: han aparecido en programas de televisión que ves o en películas que te encantan.

A fin de cuentas, los personajes de las películas son como tú: tienen sueños y esperanzas, cometen errores y a veces incluso lloran por algo triste (como cuando muere Harry Potter).

Si un personaje de una película es capaz de hacernos sentir como si fueran nuestros amigos, entonces tenemos una conexión emocional.

En cuanto se establece esa conexión, es fácil identificarse con ellos y con sus luchas.

A menudo estamos más dispuestos a empatizar con los personajes de las películas que con las personas reales.

A menudo estamos más dispuestos a empatizar con los personajes de las películas que con las personas reales.

  • Tendemos a empatizar más con los personajes de ficción que con las personas reales porque los vemos parecidos a nosotros o con rasgos que valoramos en nosotros mismos. Por ejemplo, si un personaje es amable y cariñoso, los espectadores pueden sentir que comparten esas cualidades. También pueden identificarse con la situación a la que se enfrenta el personaje (por ejemplo, ser acosado), lo que aumenta aún más su empatía hacia él.
  • Del mismo modo, algunos estudios han descubierto que los estereotipos de género pueden desempeñar un papel importante a la hora de simpatizar con determinados personajes: por ejemplo, a los protagonistas masculinos se les suele asociar con la agresividad y la dominación, mientras que a las protagonistas femeninas se les asocia con la pasividad y la sumisión[2].

A veces lloramos cuando los personajes experimentan algo que deseamos para nosotros mismos.

A veces lloramos cuando los personajes experimentan algo que deseamos para nosotros mismos.

Si eres una persona que desea algo, es posible que llores cuando le ocurre a otra persona.

He aquí algunos ejemplos de cosas que la gente desea:

  • Que un ser querido salga pronto de la cárcel (The Shawshank Redemption).
  • Que un personaje encuentre el amor verdadero (El diario de Noa)
  • El nacimiento de un hijo (Up)

Que un personaje encuentre un nuevo trabajo (The Pursuit of Happyness) Que un personaje salga de una mala situación (The Shawshank Redemption).

Que un personaje encuentre lo que ha estado buscando (La vida secreta de Walter Mitty).

Hay muchas razones, pero todo depende de los personajes y de cómo nos relacionamos con ellos.

Hay muchas razones, pero todo depende de los personajes y de cómo nos relacionemos con ellos.

Si un personaje de una película está experimentando algo que tú has experimentado en la vida real, entonces es más fácil que conectes con ese personaje.

Por ejemplo, si estuviera viendo una película sobre alguien que ha perdido su trabajo por un despido en su empresa y está pasando apuros económicos después de estar varios meses (o incluso años) sin trabajo, me sentiría más unido a ese personaje porque yo mismo he pasado por algo parecido.

Además de relacionarnos con lo que los personajes están viviendo o han vivido en la vida real, hay otros factores que pueden hacernos llorar con las películas o los programas de televisión:

– El personaje está luchando por superar algo difícil, como perder a un ser querido o intentar recuperarse tras una tragedia.

– Nos sentimos mal por el personaje porque está siendo maltratado de alguna manera por otra persona (por ejemplo, le han despedido del trabajo o ha sido engañado por su pareja).

– Queremos que el personaje triunfe en lo que se proponga (por ejemplo, estudiar o encontrar el amor verdadero).

Conclusión

En conclusión, hay muchas razones por las que lloramos con las películas y los programas de televisión.

Algunas son más obvias que otras, pero todas se reducen a los personajes y a cómo nos relacionamos con ellos.

ARTICULOS RELACIONADOS

Comments

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.

ULTIMOS ARTICULOS